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La parroquia de Miguel Esteban recibe los restos mortales del que fuera su párroco

El pasado domingo, día 19 de noviembre, la parroquia de Miguel Esteban vivió una preciosa jornada histórica y martirial con motivo del traslado de los restos del siervo de Dios Máximo Redondo Almonacid al templo parroquial. Don Máximo fue párroco de San Andrés Apóstol, de dicha localidad, durante algo más de un quinquenio.

 

125 aniversario de nacimiento y 100 de ordenación sacerdotal

La celebración revestía aniversarios sobrados: se cumplían el 125 aniversario de su nacimiento (1892) y el centenario de su ordenación sacerdotal (1917). Con el lema “Identificado con Cristo al máximo”, el actual párroco, D. Juan Antonio López Pereira y el vicario parroquial, D. Ángel Manuel Salazar Plata, preparaban todo los detalles celebrativos.

 

Grupo de 100 mártires

El Siervo de Dios pertenece al grupo de los primeros cien mártires de la Archidiócesis, cuya causa se incoó en el 2003 y que recibió el “nihil obstat” de la Congregación para las Causas de los Santos en septiembre de 2016. La semblanza biográfica del siervo de Dios se encuentra publicada en la web oficial.

 

Origen y desarrollo de este traslado 

D. Jorge López Teulón, postulador de la Causa de los Mártires de la Persecución Religiosa, explica el proceso de esta exhumación: “Todo comenzó el pasado 6 de junio de 2017, cuando tras las gestiones realizadas por el párroco de Miguel Esteban para ponerse en contacto con los familiares del Siervo de Dios, nos reunimos en el cementerio de Vallecas (Madrid) para certificar la exhumación y traslado de los restos de Don Máximo, al que fue su último destino pastoral en la Mancha toledana.
Esa misma tarde, ya en los salones parroquiales, el doctor José Díaz-Valero -que desde hace diez años colabora desinteresadamente con la Postulación para las Causas de los Mártires, además de algunas otras intervenciones en la Archidiócesis y fuera de la misma- realizó los primeros análisis. Uno de los forense de la provincia de Toledo, el Dr. Valeriano Muñoz y el odontólogo militar, don Pedro Javier Muñoz Puente han participado también de forma activa para la conservación y reconocimiento de los restos.
Desde el principio se señaló la posibilidad del domingo 19 de noviembre (nació el 18 y fue bautizado el 20 de noviembre de 1892) para la celebración de una misa de exequias y la colocación en la Capilla del Resucitado de sus restos óseos.”

 

Participación de sacerdotes oriundos de Miguel Esteban

La Santa Misa celebrada con toda solemnidad en la que asistieron los sacerdotes hijos del pueblo don José David Rescalvo Tébar, don Francisco Aparicio Mínguez, don Tomas Lara Salido, don José Ángel Espada Sánchez y el P. Fray Juan Pedro Ortega Torrero OFM, concluyó con el traslado de los restos mortales del siervo de Dios a la Capilla del Resucitado donde fueron colocados en su nueva ubicación.

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