El cardenal don Carlos Osoro, arzobispo de Madrid, presidía, el pasado 17 de octubre, la misa funeral por el sacerdote D. Enrique Barbero Peces, fallecido el pasado 25 de septiembre. La ceremonia tenía lugar en la Iglesia parroquial de Ntra. Sra. de la Asunción de Villacañas.
Junto al arzobispo de Madrid, concelebraron Mons. Francisco Cerro Chaves, arzobispo de Toledo, y el obispo emérito de Segovia, Mons. Ángel Rubio Castro.
También participaron, en la concelebración eucarística, el vicario episcopal para el clero, el párroco y los sacerdotes que trabajan pastoralmente en la parroquia, además de otros sacerdotes.
Breve semblanza
Este sacerdote, oriundo de Sonseca, tenía 89 años de edad y había recibido la ordenación sacerdotal en 1959.
Su primer destino sacerdotal lo ejerció en la localidad de Tembleque; posteriormente será destinado a la parroquia de Torrijos.
Posteriormente trabajará como formador en el Seminario para vocaciones tardías-Colegio Mayor El Salvador de Salamanca. Allí será donde conozca y trate al actual arzobispo de Madrid, mientras que D. Carlos Osoro realizaba los estudios de teología y filosofía, previos a su ordenación sacerdotal. “Durante este período, surge una amistad entre el actual cardenal de Madrid y D. Enrique Barbero” subraya el vicario episcopal para el clero, D. Álvaro García Paniagua.
Tras el período como formador en el seminario salmantino, vuelve a la Archidiócesis y trabaja pastoralmente en la parroquia de Villacañas. Seguidamente, comenzaría a trabajar en una parroquia de Madrid hasta la fecha de su jubilación.
El vicario episcopal para el clero explica, igualmente, la razón de la celebración del funeral en la parroquia de Villacañas: “D. Enrique ha estado muy vinculado a Villacañas, donde era muy conocido y querido. Por esta razón la misa de funeral se ha celebrado en esta localidad”.
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