El escrito semanal del arzobispo de Toledo, Mons. Braulio Rodríguez Plaza, va dedicado a la vivencia del domingo y lleva por título “¿Adónde iremos el domingo?”
Don Braulio aborda de la siguiente manera el carácter cristiano del Día del Señor: “Invito a pensar en lo que sucede con frecuencia entre los católicos y la Misa dominical. Con esta variedad de ocupaciones en fines de semana o en vacaciones con frecuencia familias cristianas enteras, los jóvenes y los menos jóvenes, se acostumbran a dejar la Misa dominical y a olvidar el carácter sagrado del domingo. Alguien ha dicho que el domingo está dejando de existir. Se habla, sí, del “fin de semana” como un bloque de tiempo indiferenciado, dedicado al ocio y a la diversión. Si llegáramos a perder el sentido sagrado del domingo, sería una pérdida gravísima; pero no sólo cristiana religiosa, sino también cultural.”
Domingo y Eucaristía
El Primado subraya el carácter sagrado del Día del Señor y la ineludible celebración de la Eucaristía: “En nuestro mundo, sin la Misa dominical, peligra el ambiente cristiano de la familia: niños y jóvenes crecen ya al margen de la Iglesia y de la fe. Las diversiones, y su séquito de dinero, pereza, erotismo, etc., van invadiendo poco a poco la vida personal y familiar. Entre todos tenemos que cuidar de que las celebraciones dominicales sean un acontecimiento hermoso y religioso, que llegue al corazón. Ya sé que no es ésta tarea fácil. Que habría incluso que preparar en familia entre semana, al menos un día, la Misa del domingo, y saber cuáles son las lecturas.”
Próximo Curso Pastoral y descanso estival
El arzobispo de Toledo concluye su carta semanal apuntando acerca de los objetvos del próximo curso pastoral y deseando fructíferos días de descanso estival: “Volveremos sobre este tema en el próximo curso. Ocupará nuestras preocupaciones. Tiempo habrá para ello. Pero aprovecho para desearles unos días de descanso y vacaciones saludables, si es posible tenerlas, sin olvidaros de los pobres y de quienes en verano como en invierno sufren por tantas cosas: enfermedad, falta de trabajo, soledad, amenaza de ser descartado de la vida normal de la sociedad en la que vivimos por falta de oportunidades.”
Para acceder al texto completo del escrito semanal: pinchar aquí.
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