Mons. Francisco Cerro Chaves, Arzobispo de Toledo, retoma sus cartas dominicales, tras el descanso del mes de agosto. Su primer escrito dominical de este curso pastoral lleva por título “Comunión y Coordinación: Caminando juntos con Cristo”.
Comunión para la evangelización
El prelado subraya la importancia de la comunión a la hora de “anunciar a Jesucristo”. En primer lugar hace hincapié en el origen de la comunión, fruto “de nuestra unión con la Santísima Trinidad y se manifiesta de modo especial en la experiencia del Corazón de Cristo“; exhortando a toda la comunidad diocesana “a participar activamente en la misión redentora de Jesús, llevando su amor a cada rincón del mundo”.
Seguidamente, don Francisco recuerda la necesidad de “cultivar todo aquello que favorece la comunión eclesial: con el Obispo, con los vicarios, las parroquias, delegaciones, asociaciones y movimientos”; insistiendo que la comunión “es el único camino auténtico para vivir a Cristo en su Iglesia“. En este sentido expresa lo siguiente: “Caminar en solitario, al margen del cuerpo eclesial, no es evangélico ni fecundo”.
Por último, el Arzobispo de Toledo incide en dos términos necesarios: “Comunión y Coordinación: dos pilares inseparables”. Explica, igualmente, que “la unidad, para ser eficaz, necesita estructura, diálogo y esfuerzo”. En este sentido, invita al trabajo conjunto, a través de las vicarías episcopales, tanto territoriales, como personales, para “responder con claridad y fidelidad a los retos actuales de la evangelización”.
Don Francisco Cerro concluye su escrito dominical pidiendo al Corazón de Cristo su impulso para “anunciar su amor en todos los ambientes, y que nunca olvidemos que la misión comienza por la comunión”.
El texto completo del escrito dominical está disponible en este enlace.
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