La talaverana basílica de Ntra. Sra. del Prado acogía, el 8 de septiembre, la solemne misa con motivo de la festividad de la patrona de la ciudad de Talavera de la Reina, Ntra. Sra. del Prado. Esta celebración fue presidida por el obispo auxiliar y secretario general de la Conferencia Episcopal Española, Mons. Francisco-César García Magán.
Junto al prelado, concelebraban el rector de la basílica, D. Felipe García, y el arcipreste de la ciudad de la cerámica, D. Damián Ramírez; además de un nutrido grupo de sacerdotes que trabajan pastoralmente en este arciprestazgo de la Archidiócesis.
Igualmente, las autoridades civiles y militares, junto con los miembros de la Hermandad de la Virgen del Prado, se unían a esta celebración, en este día tan señalado para Talavera de la Reina.
Mons. García Magán recordaba, durante su homilía, que “nuestra geografía diocesana es una geografía Mariana; hoy también en tantos lugares se celebran otras advocaciones de la Virgen. Talavera está en un lugar destacado en el amor y de devoción a María“.
En este sentido, subrayaba: “Me atrevo a decir que ese amor de Talavera a la Virgen del Prado es inversamente proporcional al tamaño de la imagen; bien pequeñita y, sin embargo, la devoción y el amor de los talaveranos es grande y desborda los límites de esta ciudad”.
“Hoy vengo con ilusión, me postro a sus pies para pedirle por todos ustedes para pedirle por nuestra archidiócesis, por nuestro arzobispo y también para encomendar mi persona y ministerio a su intercesión” abundaba el obispo auxiliar.
Don Francisco César tenía un recuerdo por todas las personas que sufren las consecuencias de la guerra y de diferentes conflictos: “Un recuerdo y una oración por la paz por todos los hermanos que sufren en Ucrania, en Tierra Santa; en otros lugares donde, aunque no salen en los medios de comunicación, hay situaciones de conflicto: en la república centroafricana, en Etiopía; también en otros lugares como Venezuela y Nicaragua”.