La Iglesia celebra el próximo domingo, 7 de junio, la solemnidad de la Santísima Trinidad. Con este motivo, también se celebra la Jornada “Pro Orantibus” para orar y agradecer la labor de la vida religiosa contemplativa.
Uno de los monasterios de vida contemplativa en la ciudad de Toledo, en la calle Cobertizos, es el convento de Santiago, Apóstol, donde residen 22 monjas Comendadoras de Santiago, también conocidas con el sobrenombre de santiaguistas. Se trata de la orden religiosa femenina vinculada a la orden militar española de los Caballeros de Santiago.
Este monasterio está hermanado, a través del proyecto “Con un solo corazón”, con la parroquia de los Santos Justo y Pastor de Toledo. Su priora es Sor Lucía Girón, natural de la localidad burgalesa de Quintana del Pino y quien ha cumplido 60 años de vida religiosa contemplativa. Ella, desde el locutorio del convento, presenta la labor que realizan y su vocación específica en la Iglesia.
Pregunta: El lema de este año, en la Jornada Pro Orantibus, es “Con María en el corazón de la Iglesia”. ¿Qué le sugiere?
Respuesta: El lema es muy sugerente para nosotras porque las almas contemplativas tenemos que ser reflejo de la vida de María, que guardaba en su corazón cuanto oía y veía en Jesús. Y a Ella debemos acudir continuamente en nuestros ratos de oración, al contemplar la vida de Jesús para que nos transmita los sentimientos de su corazón.
Y Ella, que es Madre de la Iglesia, nos introducirá en su corazón y, acompañados de María, cumpliremos nuestra misión de alabar a Dios y de interceder por todos.
P: ¿Cómo surge su vocación contemplativa y por qué eligió la comunidad de Comendadoras de Santiago?
R: Desde muy pequeña sentí la llamada de Dios a la vida contemplativa. Me parecía que, desde un convento, podría ayudar a todos; más que si me dedicaba a ayudar a una parcela de la Iglesia. Mi parcela sería la Iglesia entera.
No conocía a ninguna comunidad contemplativa, pero en este convento tenía una tía, hermana de mi madre y, aunque no la conocía personalmente, sabía cómo era su vida. Era lo que yo deseaba y por eso solicité el ingreso a los 11 años. Aunque tuve que esperar hasta cumplir los 14.
P: ¿Cuál es su principal carisma y cuál es el trabajo de ustedes?
R: El Papa Alejandro III aprobó nuestra orden el 5 de julio de 1175, considerándola de gran utilidad para la Santa Madre Iglesia.
Las Monjas Comendadoras de Santiago, parte integrante de la Orden Militar de los Caballeros de Santiago, fuimos instituidas “para servicio de Dios y para que con nuestro sacrificio y penitencias alcancemos del Señor el triunfo de la Santa Iglesia y el aumento de la fe en España.”
Nos consagramos a Dios en la Orden mediante los votos de castidad, pobreza y obediencia en la soledad del Monasterio con una vida de silencio, oración y sacrificio; así cooperamos con Jesucristo en la extensión de su reino y en la salvación de las almas.
A las monjas Comendadoras de Santiago, nos compete repetir en la Iglesia la figura de Santiago, empeñadas en seguir la misión que Cristo nos confió: inmolarnos por su amor en favor de todos los hombres, desde nuestro claustro contemplativo.
P: El pasado 24 de noviembre tenía lugar la ceremonia de hermanamiento del convento con la parroquia de los santos Justo y Pastor y la Hermandad de Ntra. Sra. de las Angustias a través del proyecto Con un solo Corazón. ¿Cómo vive la comunidad este hermanamiento?
R: Con mucha ilusión, sintiéndonos hermanas de todos los feligreses y de todos los Cofrades, encomendando en nuestras oraciones sus necesidades. Deseamos conocer a más personas y las intenciones por las que deseen que recemos.
Hoy domingo 24, coincidiendo con la festividad de Cristo Rey, nuestra @angustias se ha unido #ConUnSoloCorazón a la comunidad de Comendadoras de Santiago, @planpastoral @postoladoseglar @JCCHSemSantaTo pic.twitter.com/HNZctq8Ee0
— Javier Salazar (@181288donja) November 24, 2019
P: ¿Qué ha supuesto este proyecto pastoral en la vida del monasterio?
R: Un mayor interés por la vida de nuestros hermanos y sus necesidades, especialmente las espirituales.
Hemos experimentado durante esta triste situación de la pandemia, el interés que el párroco ha demostrado por ayudarnos y cómo han correspondido muchos fieles con gran generosidad, con sus aportaciones, según las posibilidades de cada uno.
Por nuestra parte, al cesar en nuestro trabajo diario, hemos aprovechado para tener más ratos de oración y de Exposición del Santísimo, turnándonos en la adoración Eucarística y en la intercesión por todas las víctimas del coronavirus y de sus familias.
P: ¿Cuál es su mensaje en relación a la vida contemplativa y a la concreta vocación de las Comendadoras de Santiago?
R: Que esta epidemia. con el confinamiento, ha contribuido para intensificar nuestra fe. No hemos dejado de confiar en el Señor y hemos palpado su providencia de una manera especial en esta necesidad. El Señor ha estado grande con nosotras en lo espiritual e incluso en lo material.
En circunstancias normales, nos dedicamos a la atención a los niños en la guardería y a la elaboración de dulces artesanos.
P: ¿Una frase o cita que resuma su vivencia y vocación como contemplativa?
R: Como Moisés en la montaña intercedía por su pueblo; así nosotras: “Ante Ti Señor, por todos los hombres”.
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